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Ing. Marcela Saldivia, Gerencia Operativa de Metrología y Calidad, Infraestructura de la Calidad y Bqca. Carolina Alarcón, Organismo de Certificación, Certificaciones de procesos y personas | INTI

Como participantes en la elaboración de la propuesta inicial e integrantes de la comisión de IRAM que está llevando adelante la primera norma nacional sobre sistemas de gestión para la equidad de género, ¿qué podrían comentarnos acerca de esta iniciativa y cómo describirían la experiencia en el desarrollo de un documento de tanta relevancia?

Lo primero a decir como antecedente es que la ampliación de derechos para mujeres y LGTBI+[1] tanto a nivel nacional como global viene trazando sus huellas desde hace décadas. Por ejemplo, Argentina es pionera en la región con la Ley de Cupo Femenino y, en el mundo, con la Ley de Identidad de Género, dentro de un plexo normativo mucho más amplio. Dicho esto, la iniciativa de la norma para un sistema de gestión para la equidad de género se enmarca en la actual política pública[2] que impulsa y fortalece la transversalizacion de la perspectiva de género en diferentes ámbitos.

 

Fue en pleno contexto de pandemia, mediados del 2020, que desde una de las acciones para reducir las brechas de género en el sector productivo del Gabinete de Género[3] interviene el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) como referente tecnológico del Estado. En tal sentido, primero analizamos diferentes normas y por la heterogeneidad de nuestro tejido productivo, que acompañamos hace 65 años, nos preguntamos: ¿por qué no construir una nueva norma argentina que sea accesible, inclusiva y aplicable? Y así elaboramos un borrador que creemos facilitó, en alguna medida, el posterior proceso de normalización que se desarrolla hoy en IRAM que es más amplio y complejo.

 

La experiencia en el Órgano de Estudio (OE) es intensa, como los debates que van conjugando diferentes intereses, lenguajes y miradas que nutren así un proceso participativo con representantes de diferentes organizaciones tanto del ámbito público como del privado para la construcción de una nueva norma con enfoque sistémico que pueda estar a la altura de los escenarios actuales y futuros.

 

Uno de los acuerdos que repetimos siempre en el OE es que la norma “debe implicar en cada organización un compromiso genuino para poder transversalizar la perspectiva de género, de modo que la misma propicie procesos de transformación y no sea utilizada como marketing”.

 

¿Cuáles son los principales aportes que consideran que esta norma le va a proporcionar a las organizaciones y qué herramientas brindará para fortalecer la equidad de género?

En términos generales, la nueva norma IRAM brindará un contenido mínimo de definiciones conceptuales para facilitar la transversalización de la perspectiva de género que será fundamental, así como un piso mínimo de condiciones para la igualdad de oportunidades y erradicación de las violencias, que sentará bases para que las organizaciones puedan desarrollar y/o fortalecer sus procesos en la gestión de la equidad de género.

 

Para diferentes organizaciones contar con la norma será significativo, ya que la misma facilita la integración de acciones y recursos para reducir sus brechas de género, promoviendo la formación e incorporación de prácticas nuevas para el aprendizaje organizacional que sin duda tendrán impacto en todas sus actividades.

 

Sabemos que el desafío es complejo y arduo y que el aporte de la nueva norma también abarca diferentes dimensiones, ya que la igualdad de género contribuye a una sociedad más sustentable y toda organización es parte de la misma, por ello asumir el compromiso de manera colectiva no solo es necesario, sino que es ineludible en estos tiempos que corren.

 

[1] “LGBTI+” Cada sigla se corresponde con una identidad (lesbianas, gays, bisexuales, travesti, trans, intersex).
[2] Plan Nacional de Acción contra las Violencias por Motivos de Género, Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad.
[3] Gabinete de Género, Coord. Lic. Paula Basaldúa, Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo, Ministerio de Economía.